OVV Mérida
Para el OVV Mérida, la
evidencia de la pérdida de protagonismo de las armas de fuego, en el contexto
de la violencia interpersonal, tiene en
parte una explicación: la denominada “economía
delictiva”. Esta imposibilidad de
adquirir armas de fuego, de parte de la delincuencia común, podría explicar el
hecho de que la mayoría de los victimarios estén tendiendo a utilizar objetos
cortantes y punzantes (cuchillos, navajas, entre otros) en la ejecución de delitos,
siendo estas armas blancas de fácil acceso por estar presente en todos los
hogares.
En la investigación del OVV Mérida se
determinó específicamente que, en lo que va de 2024, las armas cortantes o
punzantes (a veces denominadas punzo penetrantes) se erigen como principal
recurso de amedrentamiento de las víctimas en delitos como los homicidios
intencionales, en la amenaza de muerte y en los robos. Para perpetrar estas
transgresiones, los victimarios en su mayoría empuñaron cuchillos, navajas o
chuzos.
En concreto – indica
el informe - la presencia de los objetos cortantes o punzantes representó un 32,0%
del total de actos delictivos, entre enero-noviembre 2024, lo que evidencia que
desde 2019 estas armas vienen mostrando un aumento en su uso para la consumación
de delitos violentos, aunque dicho protagonismo es de forma oscilante. /Prensa
OVV Mérida