A quienes nos gusta la fiesta y la
oportunidad de compartir la alegría agradecemos el ánimo festivo que
caracteriza a las nuevas autoridades del estado y de la ciudad de Mérida, pero
no nos deja de llamar la atención que entre tanta festividad los problemas
persistan. De manera que no nos molesta para nada la fiesta, sino que se
distraigan los esfuerzos y no se resuelvan las cosas.
Así lo dejo claro el Diputado AN Luis
Loaiza Rincón indicó, “Debemos reconocer que tanto el gobernador como el
alcalde de la ciudad están trabajando intensamente por todos los ciudadanos
pero aun así la cantidad de problemas que se afrontan son muchos por lo que no
se puede dejar escapar el tiempo: hay que resolver”, dijo.
Todo no es… Fiesta y fiesta, pintura y
pintura pero las calles siguen llenas de huecos. Por donde pase encontrará
deterioro acumulado.
Todo no es… Entre fiesta y fiesta,
pintura y pintura usted visita el centro de la ciudad capital y sólo encontrará
oscuridad y ausencia de seguridad pública.
Qué bueno, entre fiesta y fiesta,
pintura y pintura la verdad es que Mérida se muere como destino turístico
porque con el Aeropuerto Alberto Carnevali no pasa nada y para llegar por
carretera a Mérida no hay gasolina.
Qué bueno, entre fiesta y fiesta,
pintura y pintura el hospital universitario y los más importantes ambulatorios
siguen sin insumos fundamentales.
Qué bueno, entre fiesta y fiesta,
pintura y pintura la parroquia Jacinto Plaza sigue abandonada a su suerte,
llena de problemas que se acumulan y muy pocas soluciones de emergencia que
nunca son suficientes.
“Concluyó Loaiza Rincón dejando claro esto
esbozado de manera constructiva, de manera que lo que si nos preocupa es que el
gobierno se dedique a lo accesorio y no a lo fundamental” puntualizó. /Prensa Primero Venezuela Mérida