***El trabajo permite conocer el grado de afectación de los merideños ante los continuos y prolongados cortes eléctricos en el estado en los primeros dos meses del año. Promedehum dará continuidad al trabajo recopilando datos a través del Hashtag #MéridaSeApaga en redes sociales, sumado al trabajo que desde la ONG se realiza con sus monitores comunitarios***
Emmanuel Rivas/CNP 23.671
Los continuos y prolongados cortes en el servicio eléctrico que a diario se registran en el estado Mérida, han afectado severamente la dinámica cotidiana y la vida de las personas que habitan el estado andino. Así quedó demostrado en un trabajo realizado por la ONG Promedehum la cual, a través de un monitoreo diario de los cortes de electricidad y el tiempo de los mismos; permitió conocer lo mucho que las constantes fallas eléctricas afectan la vida de los merideños.
El boletín presentado por la ONG Promedehum, en la voz de su director general, Rigoberto Lobo, registró cortes eléctricos de hasta 12 horas continuas en municipios del páramo: Rangel, Cardenal Quintero y Pueblo Llano; de igual forma, en parroquias como la Juan Rodríguez Suarez de Mérida, los cortes de luz en el periodo comprendido entre el 15 de enero y el 31 de enero, sumaron 43 horas con 15 minutos de las cuales, 15 horas con 30 minutos son horas laborales y 27 horas con 45 minutos es el tiempo en que los habitantes de esta parroquia merideña estuvieron en sus hogares a oscuras.
Ante estos cortes continuos y sin programación alguna, Rigoberto Lobo fue enfático al señalar que “todas las horas sin electricidad cuentan, las horas que se pierden para trabajar y producir. Las horas de descanso familiar y esparcimiento. Las horas en las que niñas y niños se ven afectados en sus escuelas y luego son sometidos a la oscuridad en sus hogares. Sumado a esto, la oscuridad reinante en horas de la noche, incrementa la delincuencia”.
En febrero la situación no fue distinta, Promedehum continuó con el registro de los cortes eléctricos en varias zonas y municipios de Mérida; destacando que, entre el 15 y el 29 de febrero, el municipio Cardenal Quintero tuvo 3 cortes eléctricos (los días 17, 25 y 27) que superaron las 12 horas continuas sin electricidad. Además, durante la segunda quincena de febrero, en este municipio, sus habitantes pasaron cerca de 64 horas sin electricidad. Situación similar registró el municipio Rangel, donde durante dos días (19 y 25 de febrero) los rangelenses estuvieron por más de 12 horas sin energía eléctrica, sumando en total 62 horas a oscuras en el periodo comprendido entre el 15 y 29 de febrero. Durante este mismo periodo, la parroquia Juan Rodríguez Suarez del municipio Libertador, estuvo 81 horas sin electricidad.
“Observamos que el promedio en comunidades de 3 municipios del estado Mérida fue de 69 horas sin electricidad, sin embargo, la mayor cantidad de cortes eléctricos ocurrieron en horario laboral”, destacó Lobo.
Por otra parte, el trabajo de Promedehum; también permitió conocer lo selectivo de los cortes eléctricos durante las Ferias del Sol que se desarrollaron en la ciudad desde el 20 hasta el 25 de febrero, donde parroquias como la Domingo Peña o la Juan Rodríguez Suarez sumaron 22 y 27 horas sin electricidad respectivamente. Mientras que la parroquia Mariano Picón Salas, la mitad de sus habitantes disfrutaron de los carnavales sin cortes eléctricos ya que se realizaban actividades enmarcadas en las ferias.
Para el director general de Promedehum, también es alarmante la afectación de la producción agropecuaria en Mérida, ante la falta de electricidad. “Los productores agropecuarios están perdiendo su capacidad para auto abastecerse de electricidad, debido a los elevados costos de mantenimientos de las plantas eléctricas que poseen, además de la dificultad para adquirir combustible para las mismas, la dificultad que existe para la reposición de equipos dañados (…) en el caso de los productores de leche, no solo necesitan electricidad para los ordeños mecánicos, también para la refrigeración de la leche fresca, electrificación de las cercas para el control del ganado e iluminación de las instalaciones por seguridad. Todo esto acelera aún más la caída en la producción de leche en la región andina, pudiendo generar desabastecimiento en ese rubro”.
Para dar continuidad a este registro de cortes eléctricos en Mérida, Rigoberto Lobo llamó a los merideños a denunciar los cortes eléctricos a través de las distintas redes sociales usando el Hashtag #MéridaSeApaga, para así conocer la magnitud de la situación por la que atraviesa la entidad en cuanto al servicio eléctrico y otros servicios que son básicos y prioritarios para los habitantes de la capital andina.