*** El proyecto de intervención plantea además de la recuperación de los
espacios, la creación de un aula ambiental comunitaria que promueva la
educación cultural y social desde la perspectiva ambiental.
Johana Briceño
En un espacio de encuentro familiar,
educativo y deportivo se ha convertido el Parque la Isla ubicado al norte de la
ciudad de Mérida, en Los Andes Venezolanos, un lugar de esparcimiento que
durante años ha sido emblemático tanto para merideños y merideñas como para
turistas.
En él diariamente y de lunes a domingo se
realizan diversas actividades recreativas, sociales y económicas que agrupan a
niños, niñas, hombres y mujeres de comunidades aledañas y del resto de la
ciudad, quienes han encontrado un espacio propicio para el sano esparcimiento que
tributa al incremento de su calidad de vida.
José Nerio Rojas, entrenador de Tenis de
FUNDET (Fundación para la Enseñanza del Tenis) tiene más de quince años
haciendo uso de una de las canchas del parque para entrenar a diario un equipo
de principiantes y otro avanzado de este deporte de raqueta.
Cada temporada, Rojas involucra diversos
niños de la comunidad quienes se han animado y mostrado interesados por
practicar tenis, comentó que se ha mantenido en el lugar porque cuenta con una
cancha certificada y con las dimensiones adecuadas, pero además por lo
atractivo y agradable, “este parque es muy bonito para hacer deporte, se
respira aire puro y estamos rodeados de mucha naturaleza. Acá se han realizado
varios festivales de Tenis y he tenido mucho apoyo por parte de la Corporación
de Desarrollo de la Región los Andes (Corpoandes).
El entrenador de igual forma sugiere
continuar con el mantenimiento de las canchas y considera oportuno el proceso
de recuperación de los espacios.
La Escuela de Bartenders de Mérida, también
realiza sus entrenamientos en los espacios del Parque La Isla, Saúl Ferreira,
director de la escuela detalló que esta práctica, la cual se estila para
exhibir botellas al momento de servir un coctel requiere de mucha concentración
y el parque les es conveniente para ello.
“Lo hemos seleccionado porque nos parece
agradable y cómodo. También contribuimos dejándolo limpio como lo encontramos o
mejor” agregó
Abilio Sosa, usuario y habitante de los
Pueblos del Sur contó que llevó a sus hijos al parque para que se diviertan y
expresó que dicho espacio recreacional es oportuno para estimular el contacto
con la naturaleza y la actividad física. “Es muy bonito y grande, deben tratar
de mantenerlo para que los niños y las niñas tengan un lugar adecuado donde
divertirse” detalló.
Por las amplias dimensiones que posee,
algunos jóvenes practican Parkour, un deporte o arte de desplazamiento libre,
tal es el caso de Fabian Fernández, quien desde hace algunos meses escogió este
escenario para entrenar “esta actividad me gusta mucho, sin embargo la
preparación física que se requiere es bastante y de mucha importancia para
lograr destrezas y evitar lesionarse” afirmó
“En Mérida no hay muchos lugares para
practicar este deporte y este lugar nos ha permitido desempeñarnos mejor y
lograr nuevos trucos” expresó Fernández, quien junto a Jesús Gómez forma parte
de la academia Movimiento Natural. “Llevo poco tiempo entrenando, pero me
siento muy contento porque ya logré sacar una mortal (giro extremo), además
parque me queda cerca de mi casa y se me facilita el traslado para los
entrenamientos” comentó Gómez.
Los jóvenes sugirieron a los usuarios
contribuir en mantenerlo limpio y cuidado pero además instaron a los organismos
de seguridad a incrementar la vigilancia en estos espacios.
Bondades para la vida
Cabe resaltar que el Parque “La Isla”, además
cuenta con áreas forestales y de una extensión importante de terreno sin
intervención, allí se encuentran diversas especies de árboles forestales como
Araucarias, Guayacán, Cínaros, Bucares, Fresno, Pomarrosa, Trinitarias,
Cipreses, Apamate, Caoba, Eucaliptos, entre otros.
También posee una Casona de la época colonial
que formó parte de una antigua finca productora y procesadora de Café, idónea
para el desarrollo de actividades formativas y recreativas. Espejos de agua,
una concha acústica, canchas deportivas, un parque infantil y un orquideario,
sin embargo en la actualidad la mayoría de los espacios requieren de
rehabilitación y recuperación.
Proyecto de Intervención
Tomando en cuenta la magnitud e impacto
social, cultural y recreativo que representa el Parque “La Isla”, la
Corporación de Desarrollo de la Región los Andes (Corpoandes), ente adscrito al
Ministerio del Poder Popular para la Planificación y actual custodio del parque
está diseñando un plan que tiene como propósito central crear condiciones que
contribuyan al cultivo de un ambiente de encuentro, convivencia y paz en la
ciudad de Mérida.
El proyecto de intervención apunta a la
recuperación de todas las áreas que permita propiciar la paz y la vida, ya que
se trata prácticamente del único espacio recreativo público y gratuito del
centro y norte urbano de la ciudad de Mérida.
Kely Rivera, arquitecta de la Oficina de
Gestión de Corpoandes, ofreció algunos detalles sobre los avances en la puesta
en valor y recuperación del mismo. “El propósito es tratar de recuperar todo”
afirmó
En tal sentido detalló que han desarrollado
diversas mesas de trabajo con las comunidades organizadas cercanas que hacen
vida dentro del atractivo, de lo cual ha resultado un Plan Maestro de
Paisajismo con el apoyo de la Fundación Viridis.
“Se ha logrado incentivar a las personas para
que estén más interesadas en el uso del parque” detalló Rivera, quien reseñó
que junto a la Misión Árbol se trabaja en la recuperación de Orquideario.
Por otra parte explicó que se están
actualizando y digitalizando los planos y se prevé la creación de un Paseo a
instalarse entre el área del Parque Infantil y la Casona que permita la
exhibición, estimulo y fomento de la artesanía local, aunado a ello la recuperación
del Mirador que permite tener una vista de 360º de toda la zona.
La arquitecta reseñó que el plan también
contempla recuperar el área de juegos, toboganes y columpios que se han venido
deteriorando por tanto uso, las canchas, así como el área verde que está en la
zona de estacionamientos.
Otro aspecto es la recuperación de los
espejos de agua y acuarios que incluye la construcción de un nuevo desarenador,
la recuperación de tuberías y mantenimiento de los ya existentes que permiten la
alimentación de agua del río Albarregas hacia los espejos de agua.
Este trabajo mancomunado que ha sumado el
aporte y trabajo de la población y diversas instituciones apunta al cuidado y
protección de un espacio común, que permite repensar el paisajismo del parque
desde un punto de vista ético, funcional y sostenible pero que además promueva
un programa educativo comunitario pensado como una gran aula ambiental, de
ciudadanía, cultivo y crecimiento de valores socialistas, con espacios
recreativos, culturales y de paz.