A juicio de
Marcos Delgado
Darwin Nava
Según declaraciones de Marcos Delgado,
presidente de la Cámara de Fedecámaras Mérida, los aumentos salariales que
prevé el Gobierno siguen el mismo patrón de los últimos 18 años, pues los mismo
son aumentos numéricos desproporcionales
que el régimen estima, pero que no va acompañada de lo que es realmente fundamental que es proponer
en conjunto al aumento salarial, las políticas anti-inflacionarias que permitan
que el incremento sea factible para los trabajadores, de tal manera, que el
salario al no tener en cuenta los
ajustes macroeconómicos que requiere el país se convierte en sal y agua incluso antes de que lleguen a sus
bolsillos.
Expresó que esto es un espiral inflacionario
que continúa acelerándose en perjuicio
total de la economía de los trabajadores y de las empresas, que también están de acuerdo con los aumentos
para sus empleados pero siempre y cuando tengan condiciones de productividad óptima,
“en la actualidad según informe de Conindustria de la semana pasada las industrias están trabajando a 25 por ciento de su capacidad, el sector
comercio está alrededor de 50 por ciento, el sector turismo con un 14 por
ciento de ocupación, por lo que no tenemos los indicadores óptimos para que las
empresas tengan un fluyo de caja para cumplir con todas las necesidades que el
nuevo salario impone”, expresó Delgado.
Dijo además que en las empresas han estado
bajando significativamente el número de
empleados hasta que llegará un momento que se harán inoperativas, pues también hay muchas empresas
que mantiene la esperanza de que la situación del país va a cambiar, y por eso,
han mantenido sus empresas de bolsillo propio pero llegará un momento que eso
no les será más factible y entonces muchas empresas comenzaran a cerrar, o en
caso contrario seguirá sucediendo lo que se observa en la actualidad con los comercios, que cambian la rotación de
mercancía vendiendo tres meses unos productos y luego otros, como tiendas de ropa
que ahora se han convertido en fruterías o venden alimentos convirtiendo en una
locura la economía, “por eso sumado a lo anterior expuesto y si el Gobierno
sigue aumentando los salarios cada 60 días, los comerciantes tendrán que seguir
aumentando los precios para poder sobrevivir”, finalizó Delgado.