Seguridad
policial brilla por su ausencia
Un grupo
de individuos de baja calaña vulneran la seguridad peatonal tras el robo de
parte de las barandas del viaducto Sucre, acción vandálica que se viene
cometiendo en perjuicio de esta importante infraestructura desde hace tiempo,
sin que el organismo que le compete haga algo para evitar que continúe el
desmantelamiento de estas barreras de protección.
La
peligrosidad aumenta cuando ciudadanos, con afecciones mentales e inclinaciones
suicidas, ven la posibilidad cierta de lanzarse por falta de las barandas.
El
alcalde del municipio debería implementar el envío de inspectores de su
Departamento de Ingeniería Civil para constatar, en sitio, la situación que
pudiera agravarse con sucesivos robos del barandaje.
Transeúntes
que a diario recorren este trayecto, que comunica las avenidas Andrés Bello y
Las Américas, sienten miedo a la hora de caminar por este viaducto al ver que
determinados tramos no cuentan con las barandas. / Agustín Volcanes