Para ingrata sorpresa de las víctimas de distintos delitos, el rostro de sus agresores suele ser muy conocido, incluso familiar.
Al menos esa es la tendencia que viene registrando el Observatorio Venezolano de Violencia en Mérida (OVV Mérida), en esta entidad andina, tras poner la lupa en el dato específico relacionado con el tipo de victimario o, lo que es lo mismo, sobre quiénes suelen ser los ejecutores de los delitos.
Así, en lo que va de año 2023 -más concretamente de enero hasta la primera semana de agosto- se han documentado 60 delitos de violencia interpersonal cometidos en Mérida donde se conoció el tipo de victimario que consumó la transgresión. Según lo que revelan los datos "hay una tendencia importante a destacar, durante ese lapso observado, que los victimarios familiares y conocidos de las víctimas desplazaron al segundo puesto a los delincuentes comunes", detalla en su informe el OVV Mérida.
La evidencia de esta tendencia la corroboraron los investigadores del Observatorio tras analizar la información que proviene del monitoreo de los medios de comunicación que comparten sus informaciones en el escenario público.
El particular rasgo de que los victimarios familiares y conocidos de víctimas de violencia interpersonal ocupen el primer lugar (y que tal tendencia se venga observando en los últimos años) puede encontrar su explicación, según el estudio del OVV Mérida, "en el aumento que hemos detectado en los últimos tiempos (2020-agosto 2023) de la violencia intrafamiliar, de género, sexual y contra niños, niñas y adolescentes (NNA)".
Por otro lado, el ascenso de los victimarios familiares y conocidos, irrumpe a la par de la reducción del porcentaje de delitos que ejecuta el hampa común.
Al respecto, en el informe se explica que "la delincuencia común al parecer -y hasta el momento- sigue perdiendo peso en la entidad, por diferentes razones que ya hemos abordado en otros momentos: migración de delincuentes al extranjero o que han 'migrado᾿ al crimen organizado donde se enfilan a cometer otros tipos de delitos más lucrativos que el robo: tráfico de drogas, trata de personas, extorsión, entre otros; desmantelamiento de bandas delincuenciales de parte de cuerpos de seguridad del Estado y muertes de delincuentes en enfrentamientos con funcionarios de estos organismos".
Prensa OVV Mérida