En Venezuela se ha establecido el 27 de junio como el “Día del Periodista”, pero en definitiva el ejercicio de la comunicación social, en su más amplio sentido, involucra un conjunto de profesionales que hacen posible la difusión de informaciones, e incluso, actualmente, la comunicación como tal, se ha ampliado por elementos diversos que involucran la acción comunicativa a partir del hecho de actores populares, cibernautas, especialistas en marketing, y todo un conglomerado humano que ejecuta acciones técnicas en favor del proceso de comunicación.
En esta oportunidad abro el debate para establecer diferenciaciones
entre lo que cada quien hace en favor de la comunicación (sentido amplio). En
tal sentido los comunicadores populares, los locutores y los reporteros
gráficos, cada quien tiene su día para conmemorar el trabajo que realiza,
inclusive existe un “Día mundial de la Libertad de Prensa” (3 de mayo).
Destaco entonces que el 12 de abril es el “Día de la
Comunicación popular”, el 6 de mayo es el “Día del Reportero Gráfico”, el 06 de
junio es el “Día de la Radiodifusión”, el 11 de diciembre se celebra el “Día
Nacional del Locutor”, y además existen fechas que a nivel internacional
coinciden o establecen otros días para conmemorar el trabajo de los actores de
la comunicación a nivel internacional.
La disonancia que ocupa mi atención es el “Día del
Periodista”, en tanto que es en esta fecha cuando muchos, especialmente los
factores de poder político, intentan homenajear (yo diría congraciarse) con
todos los actores de la comunicación y se intenta promover una suerte de
“ensalada” que, en muchos casos, termina con roses y disgusto entre los que
realmente deben ser homenajeados: Los Periodistas.
Más aún, en tiempos de revolución sea permeado el “Día
del periodista” a partir del otorgamiento de “premios” a “comunicadores
populares”, esgrimiéndose que éstos últimos son
actores sociales “asimilables” a los periodistas.
Muchos saben que soy un defensor de la comunicación
popular, pero considero que los homenajes a estos valiosos comunicadores se
deben hacer en la fecha que corresponde (12 de abril). No encuentro ninguna
justificación que soporte el “arroz con mango”. Juntos pero no revueltos.
Por otra parte, resalto una crítica de muchos años que
apunta a los “Premios de periodismo”, los cuales son y por ende deben ser para
periodistas, pero la condición exclusiva es ser “periodista”, egresado de una
universidad nacional o derivada de un título similar revalidado, pero no se
pueden establecer condiciones de agremiación y menos de solvencia a un club o
“entelequia” que se abrogue alguna potestad de indicar quien sí o quien no
puede obtener un premio.
Además, el desempeño profesional de un periodista, es
lo más público y notorio, y el reconocimiento deriva de su trabajo y no de una
carpeta llena de recaudos para que un jurado, presuntamente calificado, pueda
decidir un “ganador”.
En conclusión, el 27 de junio como “Día del
Periodista”, el homenaje es a los profesionales que posee un título que los
acredita como tales, y son los mismo periodistas quienes deben hacerse respetar
y no permitir que en un acto previsto para ellos, se sumen reconocimientos de
ningún tipo a otras personas, amén de vigilar a los “oradores de orden” los
cuales también deben ser periodistas.
Lcdo. Giovanni Barboza
/ CNP 6.640 / giovannibar@gmail.com