A pocos días de cumplirse un año del retorno del Psuv a la gobernación, Daniel Garcia secretario general del PMI, aseguró que el partido de gobierno en Merida sufre una crisis severa.
Su máxima figura el Gobernador Jheyson Guzman mantiene un divorcio con los alcaldes oficialistas más representativos del estado. Quienes han perdido capacidad de respuesta y le son negado los recursos.
Las exigencias hacia las bases oficialistas rayan en el esclavismo. No hay motivación, liderazgo ni recursos y las herramientas de control social y chantaje que utilizaban los dirigentes de base del PSUV derivados de las cacareadas misiones hoy son casi inexistentes e imperceptibles por la población.
A eso le agregamos la situación de emergencia severa en casi todos los municipios del estado han generado un malestar adicional ante la imposibilidad de las instituciones del manejo eficiente a la hora de plantear soluciones. El estado es un caos total.
El declive no es un secreto para nadie, el MVR en manos de Florenció Porras, hoy en la oposicion y su transición al PSUV hasta finalizar el periodo de ejercicio de gobierno de Marcos Díaz se mantenia un control férreo y reconocido como eficiente hasta la llegada de ex mandatario Alexis Ramirez que dilapido el capital político, llevándolo a la crisis que trajo como consecuencia, que el oficialismo perdiera el poder en la region dejándole la tarea al actual gobernador derrotado en su primera aspiracion que ascendió a la primera magistratura por la division, torpeza y pugnas irreconciliables de la oposicion.
La deserción, indisposición, migración y desencanto en las filas oficialistas, poco interés y participación de la militancia en todos los eventos políticos y electorales de renovación de autoridades, muestra la realidad que permitira a la unidad opositora conciente, dar buenas cuentas a la contienda presidencial si se dan las condiciones y asi corroborar la minimizacion de lo que fue el PSUV años atrás.
Finalmente mientras sectores de oposicion fomentan la diatriba y la confrontación nosotros estudiamos permanentemente a nuestro adversario a vencer. Prensa PMI