Arquímedes
Fajardo, secretario General del Gobierno de Mérida y presidente de Copei
** Los gastos para el funcionamiento
se han dirigido al pago de la nómina con el aumento del 200% decretado el 1° de
noviembre por el Gobierno Nacional pero desconocido por la Oficina Nacional de
Presupuesto (Onapre)
(Prensa
Copei) “En la historia republicana de Venezuela no se ha vivido,
como ahora se vive, una crisis económica tan severa que ha tocado ya los
gobiernos regionales y los municipales, llevándolos a gestionar con una
emergencia que, al parecer, bajo estos principios ideológicos amalgamados en el
llamado Socialismo del s. XXI no permite ver fin en el corto y mediano plazo”,
así lo afirmó Arquímedes Fajardo, secretario General del Gobierno de Mérida y
presidente del Comité de Organización Política Electoral Independiente (Copei)
en Mérida.
Ante
esta situación la Gobernación de Mérida no posee dinero para la nómina, pues no
ha reconocido la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre) el 200% de aumento
del 1° de noviembre así, como tampoco se ha reconocido el aumento del 50% el
cual, aún, no ha sido cancelado a los trabajadores de la Gobernación “para
poder hacer el debido pago, el cual es un compromiso del gobernador Ramón
Guevara y de su equipo de trabajo, se ha hecho uso de los recursos para
funcionamiento”, explicó Fajardo para indicar que hay, en efecto, “una
emergencia económica en el Gobierno de Mérida como nunca antes se había vivido”,
afirmó.
Pero
además, siguió diciendo el gerente público, no hay en Mérida recursos para la
inversión “hasta la fecha, y durante los últimos años, no hemos recibido
recursos para el Plan de Inversión por la vía del Fondo de Compensación
Interterritorial (FCI) el cual es un ente de Consejo Federal de Gobierno (CFG)
que le niega el dinero, que es de los ciudadanos, a los estados y municipios
donde democráticamente ganó la oposición”.
Por
tanto, dijo al terminar Fajardo, sin dinero para la nómina, el funcionamiento y
la inversión el Gobierno de Mérida está en crisis económica que procurará, en
el corto plazo, hacer una verdadera reingeniería financiera para garantizar su
funcionamiento.