El presidente Maduro sigue dignificando al pueblo
*** El gobierno bolivariano avanza en un plan de
regularización de residencias en el estado Mérida, para reubicar familias que
esperan por un techo propio.
Las diez familias que se encontraban en situación de
refugiados en el Hotel Valle Grande, ubicado en el municipio Libertador del
estado bolivariano de Mérida, este viernes se mudaron con alegría a sus nuevos
hogares.
Esto de acuerdo a instrucciones emanadas del presidente
Nicolás Maduro, a través de la Vicepresidencia para el Área Social, dirigida
por Aristóbulo Istúriz, de manera articulada con el Ministerio del Poder
Popular para Vivienda y Hábitat.
Jehyson Guzmán, protector de la entidad, destacó que la
dignificación de estas familias, a las cuales se les otorgó un techo propio, se
logró consolidar a través de un plan de regularización de viviendas.
Ahora el gobierno bolivariano iniciará la restauración de
las instalaciones del Hotel Valle Grande, en cuyas cabañas estaban estas familias
desde hace aproximadamente nueve años y ahora ya están en su nuevo y definitivo
hogar, disfrutando de un espacio digno como solo en revolución se puede lograr.
“Gracias al presidente Nicolás Maduro y a la revolución bolivariana, que las ha
dignificado, las ha protegido con la política de la Gran Misión Vivienda
Venezuela”, destacó.
El protector agradeció además, al trabajo que viene
haciendo el equipo de la Gmvv, la viceministra Johana Carrillo y el
vicepresidente área social Aristóbulo Istúriz, quienes han hecho todas las
coordinaciones correspondiente para que a partir de este martes el Hotel Valle
Grande sea declarado como un espacio refugio cero.
Destacó que se ha planteado con la mesa social un
conjunto de políticas articuladas que permitan que estas familias se puedan
integrar exitosamente en su nuevo entorno, que sean incluidas de manera plena
en los programas sociales, los niños en el sistema educativo, en las
comunidades donde están llegando, de modo que sus integrantes, no solo se estén
llegando a un nuevo hogar, sino que también sean incorporados socialmente y
protegidos por las políticas del presidente Nicolás Maduro.
El apoyo que necesitaban
Erika Ortega, refugiada por nueve años junto a su familia
en el Hotel Valle Grande, hoy siente que se ha cumplido uno de sus grandes
sueños, el principal, tener una vivienda propia, digna, por lo que está muy
agradecida por ese respaldo que llegó en el mejor momento, el apoyo que
necesitaban para seguir avanzando. “Me siento agradecida, principalmente con
nuestro presidente Hugo Chávez Frías y el presidente Nicolás Maduro; también
con el ministro Villarroel, Jesús Araque y su equipo político, que nos ayudo
para que hoy estemos reubicados en nuestras viviendas, gracias a Dios y a todos
porque estamos en nuestros apartamentos; a mí me tocó en Doña Rosa, en el
pent-house, en el bloque siete”.
Ortega pidió que así como los ayudaron a ellos, también
lo hagan con otros. “Agradecida con Jehyson Guzmán por el trabajo que está
haciendo, que Dios lo siga ayudando a cumplir con todo esto. La gente que
habite su vivienda”.